miércoles, 13 de diciembre de 2017



365 DÍAS PARA SER FELICES MULTIPLICADOS POR UNA VIDA

Ser feliz, nos parece un camino inalcanzable en medio de nuestra vida rutinaria. Muchos sois los que me preguntáis, ¿cómo? Es tan sencillo como dejar de intoxicarnos con pensamientos negativos y mirar la vida desde otro ángulo.
Un año más, el día a día ha pasado a una velocidad increíble y nos volvemos a encontrar en estas fechas tan señaladas para nuestra cultura. Cada año oigo más este comentario “otra vez a Navidad, que suplicio”.

¿Qué ha pasado? ¿Dónde estás nuestro espíritu navideño? Y no hablo del de la religión, que ha quedado obsoleta en muchos hogares, sino del Espíritu real de estas fechas, EL AMOR, EL COMPARTIR, EL ABRAZARSE...

Este “espíritu” es el que llevamos todos dentro, es nuestra esencia. Por Navidad, nos reunimos con el anhelo de que este será diferente. La realidad es distinta. Nuestros recuerdos y nuestra mente se desbocan recordándonos lo mal que lo pasamos el año anterior y empieza un círculo vicioso.  Pero, ¿por qué no nos permitimos vivirlo realmente como lo deseamos? La respuesta es fácil, tiene un precio, como todo en la vida. Cuando haces lo que realmente sientes, te rechazan porque no entras en el labirinto espinoso del políticamente correcto.

Manda este concepto a freír espárragos y VIVE. ¿No te das cuenta que llevar una máscara para gustar a todos, para aparentar que TODO VA BIEN, etc. te asfixia? En todos los hogares se cuecen habas, y más en los tiempos que vivimos. ¿Por qué debemos de aparentar ser perfectos, mejores que los demás? Pues porque nos han educado así.

El sistema capitalista, las comparaciones, el aparentar son el coctel perfecto para sabotearnos estas fiestas.  Sacamos los trapos sucios, no por ventilarlos precisamente, sino para recrearnos en estas creencias tan instaladas en nuestras mentes. ¿No creáis que ha llegado el momento de empezar de nuevo? Tal como se dice, año nuevo, vida nueva.

¿No sería mejor hacer la colada todos los días? ¿Por qué esperar días festivos para hacerla? Están señalados para disfrutar, no para sufrir. A caso crees que, porque haya pasado un año, ¿tu mente habrá olvidado todo lo negativo?
Pues no, lo tienes almacenado en tu interior y hasta que no sanes estás heridas, volverán a doler.

Conclusión, la situación será tensa y todas tus buenas intenciones, porque es navidad, se irán a tomar viento. Entraras en la espiral del maltrato personal, del autocastigo y saldrás de allí peor que entraste. ¿Cuándo te vas a dar cuenta que sanar tus heridas es un trabajo diario? Hay que hacer la colada regularmente, sino se acumula y las manchas se vuelven resistentes.

Nuestra sociedad ha perdido valores, eso dicen por allí. Yo no lo creo. Estos valores siguen dentro de nosotros, pero los apartamos. Vivimos tan estresados que no nos da tiempo para mirar dentro de nosotros mismos. Recordamos solo qué hay que hacer y no tanto cómo hay que hacerlo. Hace tiempo que no nos respetamos, que vivimos por los demás. Todo para el exterior y bien poco para el interior. Así nos va la vida. Nos perdemos y sufrimos por ello.

 Es momento de volver a despertar estos valores, no solo para las fiestas, sino cada día de nuestra existencia. Para ello hay que soltar el dogma del bien y del mal y creer en el Amor. El Amor que todos llevamos dentro. Con él nacimos, y, con él moriremos. Puede estar enterrado debajo de un montón de basura mental, tal como conceptos adquiridos, o estar viajando libremente por todo nuestro ser.

Para encontrarlo no hay que hacerse tantas preguntas, solo observarnos. Si estamos en paz y en serenidad, vibramos desde el Amor. Si nos sentimos mal significa que debemos aprender algo de esta situación ya que nuestra mente se queja, no nuestro ser. Desde el observador podemos aceptar, entonces dejará de molestarnos porque lo habremos entendido. Tan fácil como sumar 1+1. Claro está, pero primero debemos de aprender las matemáticas de la vida y entonces, vivir es una gozada, no un suplicio.

¿Qué puedo desearte para estas fiestas? Que inicies tu camino en las matemáticas de tu vida. Si ya lo has hecho, entonces que sigas sin rendirte porque es un mundo maravilloso que te enseñara a sumar momentos mágicos. Es un aprendizaje largo, pero más sabes, más ganas tienes de aprender de ti. Estás tan feliz que ya no das importancia a cosas que antes te torturaban; porque has aprendido que todo ocurre por una razón y todo está bien. Dejas de responsabilizarte de las actitudes ajenas y te centras en ti.

Este es mi mejor deseo para ti. Has la colada a diario con el corazón alegre. Esto te llevará a recorrer este mundo con una gran sonrisa en los labios. Cuando tu mente ataca, solo tienes que recordarle que tú puedes sonreír.

Tienes 365 días al año para hacerlo, no esperes, el momento es siempre aquí y ahora.  Multiplica estos momentos por una vida entera y serás rico en experiencias. Las experiencias se sumarán en aprendizajes y te darás cuenta de lo maravilloso que es vivir. Cuando sea el momento de partir, te sentirás tan lleno de amor que darás el paso con alegría sabiendo que te llevas todos estos momentos en tu interior. Allí nadie te los arrebatará, son tuyos. Esta es tu verdadera riqueza, la que te llevarás contigo.

En estas fechas y todos los días del año regala un abrazo, una sonrisa, un compartir. Expresa cuanto quieres y cuanto agradecido estás por vivir lo que estás viviendo. Ya no puedes cambiar el pasado, pero si vivir un presente diferente que te traerá un futuro mejor.

FELIZ
13 14, 15…
DE DICIEMBRE
FELIZ FINAL DE 2017
FELIZ EXISTENCIA
FELIZ VIDA A TODOS
FELIZ  2018

GRACIAS POR FORMAR PARTE DE MI CAMINO.

OMALUHE
MARTINE RAST BOILLAT

martinerastboillat@gmail.com